Disfruto muchísimo de mi trabajo diario, pero me encanta ir al obrador y crear nuevas recetas, pensar nuevos packagings... en definitiva, crear nuevos productos. Cada día es una nueva oportunidad para explorar mi creatividad y ofrecer lo mejor de la repostería artesana.

La intención de nuestra marca es la de proteger, transmitir y poner en valor la cultura gastronómica referente a la repostería casera de nuestra zona, la que se hacía en las casas del rural gallego, visibilizando las que son las verdaderas protagonistas de la historia, las mujeres que elaboraban estas recetas dulces a partir de productos que tenían en sus casas y que transmitieron de generación en generación.

Queremos ser una empresa útil y rendible para la sociedad. Ser reconocidos por la producción responsable. Demostrar que desde el rural y la economía social se pueden gestionar compañías cuyos objetivos estén al servicio de las personas, la innovación, y la sostenibilidad. Queremos ofrecer alimentos diferentes, sanos, sabrosos, seguros y útiles para la sociedad. 

La empresa nace de la mano de la familia Rodríguez Piñeiro y su principal deseo: elaborar Tarta de Santiago de la más alta calidad.
Con el paso de los años, nos enorgullece mantener el mismo compromiso con la repostería tradicional, a la que unimos innovación y tecnología, para satisfacer los criterios de excelencia que esperan nuestros clientes.
Todo eso significó ampliar horizontes desde la sensibilidad de unir el arte con la gastronomía.

Todos nuestros procesos son realizados manualmente, con ingredientes seleccionados y sin aditivos.

Los productos de Mamá Teresa están hechos a mano y con materias primas naturales y de primera calidad, elaborados sin colorantes ni aditivos.